A.
Quinlan comenzó una dieta estricta para poder usar un vestido que había
comprado recientemente para lucir en una fiesta. El 15 de abril, no habiendo
comido nada, excepto unas rebanadas de pan en un período de 48 horas, asistió a
una fiesta en casa de un amigo. Durante el transcurso de la fiesta, tras
consumir una sobredosis de alcohol y Valium (un tranquilizante), Quinlan dijo a
sus amigos que se sentía mareada y fue a recostarse en la cama de su amigo. Más
tarde fue encontrada por los que asistieron a la fiesta, inconsciente y sin
respirar. Fue llevada de urgencia a un hospital, donde se le diagnosticó una
anoxia prolongada por falla del sistema autónomo y carencia respiratoria; fue
puesta en un respirador artificial en el hospital. Sin embargo, el daño
cerebral era tal que quedó en estado vegetativo. No se precisó la causa de la
falla respiratoria, aunque su madre dijo que el diagnóstico médico fue que se
quedó dormida o inconsciente, y que se ahogó con su propio vómito, esto también
pudo haber sucedido por la combinación de alcohol, barbitúricos y la
autoimpuesta privación de comida. Después de algunos meses, sus padres
solicitaron que fuera retirada del respirador que la mantenía viva, pero el
personal hospitalario se negó. En 1976, los Quinlan llevaron su caso a la
Corte Suprema de Nueva Jersey, que autorizó la decisión de los padres. Cuando
fue quitada del respirador, Quinlan sorprendió al mundo porque continuó
respirando de forma no asistida, alimentando la remota posibilidad de
recuperación, siendo alimentada artificialmente por nueve años más. Vivió
en estado vegetativo persistente hasta su muerte por neumonía en 1985; pesaba
apenas 36 kilos.
CURIOSIDADES
La Dermatitis Atópica es un padecimiento crónico y recurrente de la piel
que se caracteriza por lesiones con enrojecimiento, prurito intenso, y
frecuentemente resequedad en diferentes partes del cuerpo, que se presenta
en episodios agudos, por tiempos e intensidad variables, y generalmente también
con períodos "sanos" de duración variable. Además se caracteriza por
manifestar una reactividad muy alta de la piel a estímulos físicos e irritantes
directos, y una mayor susceptibilidad a cierto tipo de infecciones cutáneas
(como los hongos ó el estafilococo).
La
Dermatitis Atópica es un factor de riesgo para el desarrollo posterior de asma.